lunes, 9 de noviembre de 2015

Modelos de gestión para la empresa, ¿cuál debo elegir?

Los modelos de gestión de las empresas buscan principios generales que puedan ser aplicables a cada organización particular, sin embargo debemos recordar siempre que son una guía de acción pero no la respuesta a todas las soluciones.

Si hacemos revisiones de literatura podemos encontrar modelos de gestión para empresas que tienen enfoque en las personas, es decir que el éxito de la organización y el logro de los objetivos está supeditado al manejo que tengo de mi equipo humano (modelo de Werthers y Davis, o de Chiavenato). Por otro lado, aparecen modelos de gestión empresarial enfocada en planes de acción (Harper y Lynch) o en base a la competencia existente en el mercado (Michael Porter).

Sólo he nombrado cuatro modelos que intentan mostrar la guía idónea para alcanzar los objetivos empresariales, y hay muchos más aún... Por tanto, ¿cuál es el modelo adhoc? y la mejor respuesta siempre será: "depende del estado actual de mi organización". El ideal es aplicar un sistema conjunto, en donde pueda estudiar la gestión del capital humano; la arquitectura (estructura); evaluar financieramente para conocer la viabilidad que valora el dueño o junta directiva; y nunca olvidar que estoy en un mercado "vivo", en donde día a día la competencia intenta incrementar su participación y ser líder en el sector. Si tengo presente al menos estos ingredientes, puedo asegurar un diagnóstico certero que permitirá tomar las mejores decisiones para el futuro.

En mi opinión personal, estos antecedentes no son algo nuevo ni difícil de imaginar. Es lógico creer que para gestionar de la mejor forma mi empresa debo estar al tanto de elementos básicos para actuar. ¿Imagina ser el capitán de un barco sin una carta de navegación, ni datos metereológicos, ni información sobre las raciones de comida a bordo?... claramente podríamos navegar, pero con un resultado incierto y que a priori me hace pensar en un fracaso. A cambio de lo anterior, pensando en la empresa: ¿puedo gerenciar sin saber cuáles son los objetivos reales que espero cumplir? ¿qué metas debo alcanzar? ¿y qué recursos tengo para esto?...



Lo importante es estar informados y elegir las herramientas que se ajustan a lo que realmente necesitamos en un momento específico. Haciéndose las preguntas adecuadas, encontrará las respuestas que le permitirán lograr las metas propuestas.