lunes, 29 de febrero de 2016

¡Tiempos de crisis!: una oportunidad de surgir o una tortura de lamentos

Es extraño intuir o predecir cómo actúa la mente humana, pues ante un escenario en común se pueden obtener una serie de resultados diferentes y contradictorios entre ellos. Partamos como base de que son las personas quienes administran las organizaciones, y por tal son sus valores, filosofía e incluso la ética, los elementos que definen las acciones de la empresa.

Las crisis, sea cual sea su origen, pueden ser analizadas bajo dos perspectivas: una oportunidad o una amenaza. Este primer pensamiento es que el delimitará el actuar y las estrategias que se implementen en las empresas.

“Si mi empresa es afectada por una disminución en los precios de venta” ¿qué debo pensar? Y luego, ¿qué hacer? En primera instancia debemos definir cómo enfrentaremos el desafío:

Opción 1: Evitar al máximo la crisis y buscar soluciones rápidas que nos mantengan con espacio para seguir operando
     Cuando estamos seguros que hay una amenaza en el medio nos podemos hacer los desentendidos; podríamos hacer creer al personal que nada malo va a ocurrir; e incluso se puede reestructurar para atender más rápido las urgencias, pero hay otra alternativa...

Opción 2: Enfrentar la crisis de frente, prever los posibles efectos y tomar acciones preventivas
      Una forma positiva de enfrentar desafíos es atacar el problema real, ser sinceros con los colaboradores, clientes y proveedores, de modo que entiendan la situación y se fortalezcan los lazos de la organización. Cuando una empresa es capaz de sincerarse en forma interna, está en condiciones reales de solicitar el apoyo de su equipo y es allí cuando nacen los mayores aportes de cada uno de los individuos que componen la firma.


De todos modos es bueno pensar, ¿cómo quiero enfrentar el problema? Y al menos ya cuenta con dos posibles escenarios de respuesta…

Recuerdo que hace unos meses atrás asistí a una charla de una universidad en donde presentaban un recuento de los 100 años de la teoría de la relatividad de Einstein. No entraré en detallar lo teórico, sino el mensaje oculto de la experiencia.

En uno de los momentos complejos de la vida del destacado científico es que surgen en él las ideas más extrañas (para la época) e inicia una serie de publicaciones que pronto lo llevan a alcanzar fama mundial hasta nuestros días. Su crisis comenzó sin que tuviese trabajo, sin poder cumplir sus sueños de dedicarse profesionalmente a la ciencia, con pocos recursos y en una situación donde muchos habrían preferido decaer en vez de sobreponerse. El resultado todos lo conocemos, pero depende de cada persona, equipo humano o de la filosofía a nivel empresa el mejor camino para buscar soluciones.